10 de gener del 2008

Santa Cruz Mountains: la magia de Paul Draper.


Aunque conocía su trabajo dentro del mundo de la viticultura y la enología, no había tenido la oportunidad, todavía, de probar ninguno de los vinos que elabora Paul Draper hasta hace unos días, cuando decidimos abrir un Ridge Santa Cruz Mountains Cabernet Sauvignon 1998 de la bodega Ridge Vineyards (Santa Cruz Mountains AVA,California), un coupage donde la Cabernet Sauvignon es la reina(88%) junto con la Merlot(5%), Petit Verdot(5%) y Cabernet Franc(2%).
Famoso por sus principios de intervención mínima (hands-off) en la elaboración del vino, Paul Draper es sin duda uno de los enólogos más influyentes(si no el que más) y respetados de Estados Unidos. Cuatro décadas en Ridge Vineyards le avalan.
El vino que nos atañe aquí proviene, como su nombre indica, de las Santa Cruz Mountains, situadas justo al sur de San Francisco. Esta zona es, por su particular suelo(roca franciscana roja en descomposición mezclada con arcilla y una capa subyacente caliza) y clima, ideal para el cultivo de la Cabernet. Al contrario que en Napa, por ejemplo, donde el nivel de insolación es mayor y los vinos ostentan una mayor graduación alcohólica, en Santa Cruz Mountains la temperatura es bastante más fresca, por no mencionar la altura a la que se cultiva el viñedo (entre 500-800m.)confiriendo al vino una mayor suavidad. Esto se debe en parte también por la proximidad de la bahía de San Francisco que ayuda aportando frescor y humedad.
Pues bien, este vino, no siendo la estrella de la bodega, proviene, prácticamente, de las mismas parcelas que el Ridge Monte Bello, el archiconocido a nivel mundial(véase el famoso Juicio de París), cabernet insignia de la bodega.
La cosecha de este 98 fue sensiblemente más reducida en relación a otros años, y además, debido a una primavera muy tardía, se tomó la decisión de reducirla aún más con el fin de asegurar una óptima maduración del resto de la uva. Las moderadas lluvias en Agosto favorecieron el posterior envero en Septiembre. A partir de aquí el sol y el buen tiempo hicieron que a mediados de Noviembre(una cosecha muy tardía), justo antes de las primeras lluvias invernales, la uva ya estuviera en su punto ideal de maduración y se procediera a vendimiar.
Una vez vendimiado y durante la fermentación(la mitad de esta la hace en barrica de roble americano y la otra mitad en acero), la alta extracción de taninos y color que se observó hizo que el tiempo de contacto del mosto con el hollejo también se acortara, aportando más suavidad al futuro vino. Por lo general el Santa Cruz Mountains se embotella después de dieciocho largos meses de crianza en barrica de roble americano 100%, aunque para esta cosecha fueron necesarios ocho meses más para acabar de perfilar su estructura y ensamblaje. Una larga crianza para un vino que produce grandes satisfacciones, sin duda. Paul Draper aconseja guardar durante un mínimo de 5 a 10 años este vino para una mayor satisfacción a la hora de catarlo, puesto que el tiempo irá suavizándolo paulatinamente. Y así lo hizo un servidor: siguiendo los consejos del gurú y tras 7 años en la botella, destapamos y apareció esta obra de arte hecha con toda la genialidad de Draper.
Después de haberlo decantado durante dos horas a una temperatura estable de unos 12-13ºC procedimos a la cata, y la cosa fue así: en copa tiene un color cereza intenso muy brillante y una extracción alta, de capa media/alta, diría yo. En nariz, notas de pimienta negra, regaliz, tostados del roble(nada opacos, en su justa medida), cedro, y algo de cuero viejo, además de mucha fruta negra madura(cassis y ciruela). Ciertos toques de barniz fino. Goloso y muy expresivo, en mi opinión. En boca no defrauda nada: una acidez muy correcta sobre las notas características de la Cabernet, toques torrefactos del café que dejan una ligera y agradable sensación amargosa al final. Taninos aterciopelados. Elegante. Retronasal especiado y ahumado(notas de vainilla). Suave, redondo, equilibrado, largo e increíblemente fresco(para su edad), un ensamblaje perfecto, ideal para beberlo ya!! No se le puede pedir más después de dormir 7 años(pero en contínua evolución, claro) en botella. La RCP es francamente buena, su precio en Vilaviniteca es de 33,50€. A veces vale la pena darse una alegría como esta.

Espero, en un futuro no muy lejano, poder hacer la reseña de su afamado Ridge Monte Bello. Todo se andará.

Para los que queráis saber más sobre Paul Draper, el San Francisco Chronicle le hizo este interesante videoreportaje que os enlazo aquí.(En Inglés)

Nota: las primeras imágenes son de slate.com y de la web de Ridge, respectivamente.


9 de gener del 2008

Speciale Enoteca d´Italia


Que el nordeste italiano (Trentino-Alto Adige , el Veneto, Friuli-Venezia Giulia y Emilia Romagna) es lugar de inmejorables vinos, es de todos conocido, pero que además podamos disfrutar de muchos de estos vinos en nuestro país, es algo bastante novedoso. Ya desde el verano pasado tenía ganas de escribir esta reseña, cuando fui a echar un vistazo(como hago cuando tengo ocasión) a Enoteca d´Italia y Alberto y Leo tuvieron la amabilidad de invitarme a una cata que tenían concertada. Mis más sinceras gracias por dejarme tomar parte en la experiencia de catar unos cuantos vinos sin duda bravissimi. Además tuve la oportunidad de conocer a varias personas que sólo conocía hasta la fecha de leídas, todos ellos amantes del vino, como un servidor: desde aquí un saludo a Pilar y Jose de Els vins de Pilar Vi-dal i Jose Blanco-tinto y también otro a Joan Gómez de Estintobasico y De Vinis Cibisque. Pues bien, siguiendo el hilo de aquella calurosa tarde de verano, en l´Enoteca tuvimos la oportunidad de catar ocho vinos(cinco blancos y tres tintos) de diferentes bodegas y DOCs.

A saber: un San Michele 2006 de bodegas Ca´Rugate (Soave Classico DOC) muy fresco. Este Soave está elaborado con uva 100% Garganega, la variedad predominante en las colinas de la DOC, que fermenta en depositos de acero a 16-18ºC durante unos 8 a 12 días aproximadamente. La vendimia se realiza a finales de septiembre en las fincas que la bodega tiene en Monteforte d´Alpone. De color amarillo pajizo, en nariz llaman la atención las notas de flor de tilo y camomila. En boca resulta muy fresco y bastante punzante(fino carbónico) al abrirlo, con unas notas de fruta blanca de hueso(melocotón Gladis y albaricoque) muy agradables. La relación acidez/alcohol es bastante equilibrada(12º).Todo un ejemplo de Soave a 12€.

Después se abrió un San Pietro 2004 de bodegas Le Vigne di San Pietro (Veneto Bianco IGT) excelente. Este vino se elabora también a partir de uva 90% Garganega y 10% otras(tal vez Cortese, Tocai y Trebbiano), recogida a mitad de septiembre en las fincas propiedad de la bodega en Sommacampagna, y fermentada mitad en depósito de acero, mitad en roble de Allier. Tiene una crianza aproximada de 12 meses de los cuales la mitad es en acero y la otra en barrica. Además reposará durante 6 meses reduciendo en botella antes de salir a la venta. En nariz es un regalo: flor de tilo, acacia, manzanilla y cítricos muy bien armonizados. No menos regalo resulta en el paladar: ligeramente punzante al abrirlo y con suave fondo mineral(caliza). Recuerda ciertamente a níspero, melocotón y albaricoque, todo ello sobre una acidez marcada que ensalza y equilibra el conjunto(13º). Paso en boca ligeramente cálido y persistente. De este mimadísimo y excelente vino, Carlo Nerozzi embotella solamente 8.000 botellas, tal vez sea este el secreto de tan buen resultado. La RCP del vino es francamente buena, 18,30€. Quien prueba repite.

Para terminar con los blancos de la variedad, se descorchó un Bucciato 2004 de Ca´Rugate (Veneto Bianco IGT), muy maduro y sabroso. También aquí se utiliza la uva Garganega al 100% en la elaboración. Como en el caso del San Michele(el vino anteriormente reseñado, también de Ca´Rugate) la uva procede de los viñedos que hay en las colinas de Monteforte d´Alpone. Este Bucciato se vendimia a finales de Octubre, algo más tarde en relación a la vendimia de otras Garganegas, consiguiendo de este modo un nivel de concentración más alto. En la vinificación, el mosto fermenta con el hollejo("le bucce", de ahí Bucciato) al estilo de los vinos tintos, durante los 4-5 primeros días, completando la fermentación en depósito de acero inoxidable donde una vez terminada esta, reposará entre 10-11 meses hasta su embotellado. De color dorado intenso, en nariz sigue una línea semejante a sus dos predecesores, aunque esta vez la Garganega se ve matizada por unos ligeros toques ahumados(en mi opinión), y la suavidad de la miel. En boca resulta, untuoso, concentrado, cálido, suave con notas de pera williams en almíbar. Es deliciosamente expresivo y equilibrado, con cuerpo. La acidez está muy lograda y no denota ninguna sensación frizzante (de aguja fina)al abrirlo, como es el caso de otras Garganegas. Toda una sensación en botella de 0,50cl. por unos 12€, ¿cabe más?

Tras los varietales de Garganega se abrieron dos varietales más, esta vez de Gewürztraminer. El primero de estos un Hofstätter Gewürztraminer 2006 de la bodega Hofstätter (Alto Adige DOC) es un ejemplo de la Traminer clásica. En la elaboración de este Traminer, el mosto resultante de un primer prensado ligero reposa en contacto con las pieles durante algunas horas antes del prensado normal. Acto seguido todo el conjunto fermenta en depósito a una temperatura constante de 20ºC. Posteriormente madurará en depósitos de acero durante 6 meses. Conviene dejarlo reducir en botella durante un año antes de abrirlo para que pueda expresar su potencial al máximo. De color amarillo pajizo en nariz recuerda a las notas típicas de la variedad: muy floral, destacando rosa, azahar y tilo. En boca se muestra algo punzante pero pleno, graso, con cuerpo y muy fresco. Fruta blanca de hueso muy presente y al final denota ciertos toques vegetales de la piel. La relación acidez/alcohol es muy correcta para los 14% que ostenta. Es un vino fresco y muy vivo.

El segundo Traminer que probamos ofreció, tal vez, las notas más puras del varietal: el Gewürztraminer 2004 de la sociedad cooperativa Kellerei Cantina Tramin 1898 (Alto Adige DOC). Este Traminer una vez vendimiado se procede a su inmediato prensado para vinificarse posteriormente en depósitos de acero inoxidable a una temperatura de 21ºC sin dejar que haga la fermentación maloláctica. La vendimia procede de las parcelas que los miembros de la sociedad cooperativa(una de las primeras de la región) tienen entre Termeno y Montagna sobre un terreno predominantemente arcilloso-calcáreo cuya altitud oscila dependiendo de la zona entre los 300 y 450m. sobre el nivel del mar. De color amarillo pajizo, en nariz se muestra más intenso que su predecesor en la cata: las notas a flores secas además de rosa, azahar y tilo resaltan más. En boca muestra mucho más cuerpo y estructura, es redondo, equilibrado, pleno, untuoso y la fruta blanca de hueso siempre bien presente. Notas vegetales y de melocotón en almíbar al final. Una acidez muy lograda resalta el conjunto sobre los 13,5% que posee.Muy expresivo y largo. Un verdadero regalo para el paladar. La RCP es más que buena: 17,30€. Hay que probarlo.

Y dejamos las variedades blancas, para catar tres vinos tintos cuyas variedades son muy representativas del nordeste de Italia. En primer lugar un Lagrein 2005 de la bodega Hofstätter (Alto Adige DOC) un vino ideal para cualquier ocasión y elaborado con la variedad autóctona homónima del Alto Adige. Este vino, procedente de las fincas que la bodega posee en Termeno y en el municipio de Ora, después de vendimiado, fermenta junto con el hollejo durante unos 10 días aproximadamente a una temperatura constante de 28ºC y justo hacia el final se sube la temperatura para obtener una mejor extracción de color y sabor. Tras la fermentación, hará una crianza de 10 meses en barrica de roble esloveno y una reducción posterior en botella de 6 meses más antes de estar listo. A la vista es de color picota intenso, casi opaco,muy brillante y con una capa bastante alta. En nariz destacan los aromas especiados y el sotobosque con ligeras notas balsámicas. En boca es suave, de cuerpo medio, mucha fruta negra madura(ciruela y mora) y toques de regaliz que le confieren un punto amargoso y elegante al fondo(en mi opinión). Es suave, tánico, con una acidez muy equilibrada, largo y sorprendentemente fresco para los 13% que tiene. El Lagrein es una variedad tinta estupenda para iniciarse en el mundo de los vinos italianos.

Poco después del Lagrein llegó el penúltimo vino: un Campo Lavei 2005 de Ca´Rugate (Valpolicella Superiore DOC) un coupage de Corvina (40%), Rondinella (30%) y Corvinone (30%). En la elaboración de este vino, la familia Tessari emplea un método bastante singular: la uva se vendimia a principios de Octubre y una parte de la misma se deposita en cajas de madera donde empezará un proceso de pasificación hasta su estrujado a finales de Diciembre. El resto de la uva se vinifica tras la vendimia. Después del despalillado, el mosto fermenta junto con los hollejos en depósitos de acero durante 7 días para terminar su fermentación en barrica donde se afinará en una crianza de 8 a 10 meses. En nariz destaca el tabaco, la pimienta y la fruta negra(mora, ciruelas y arándano). En boca es bastante equilibrado y cálido aunque necesita reducir más en botella pues los taninos son algo rugosos todavía, por pulir. La acidez sostiene perfectamente los 14% que alcanza. Largo y estoy convencido que con más botella estupendo.

Y para terminar, desde Forlì, un Petrignone Sangiovese Riserva 2004 de la bodega Tre Monti (Sangiovese di Romagna DOC Superiore Riserva), elaborado 100% con uva Sangiovese di Romagna. La vendimia se efectúa manualmente a mediados de Septiembre sobre unas cepas que tienen una media de 40 años. En el proceso de vinificación el mosto macera durante 12 días a una temperatura de entre 28-30ºC con la consiguiente fermentación maloláctica para posteriormente afinarse en barricas de robles francés de Allier de segundo y tercer año durante unos 10 meses aproximadamente. Color rubí intenso muy brillante, de capa más bien media. Una vez abierto del todo, en nariz es impresionante: mucha fruta roja madura, notas balsámicas y humo sobre una madera bien ensamblada. En boca es equilibrado, redondo y con un tanino muy suave y ligeramente tostado. Es expresivo, de postgusto ahumado, frutoso y elegante. Tal vez si fuese más largo(como el Lagrein, por ejemplo) sería un vinazo completo. De esta joya, la Azienda Tre Monti factura 20.000 botellas. Un vino muy mimado, sin duda.

Y esta fue la cata de aquella tarde de verano en Enoteca d´Italia. Debo decir que a raíz de aquello y en los seis meses que han pasado desde entonces, no he dejado pasar por alto siempre que tengo la oportunidad, de acercarme por allí(cuando puedo, porque Castellón pilla un poco lejos) para llevarme algo nuevo y descubrir vinos magníficos. Gracias de nuevo a Leo y Alberto por haberme invitado aquel día y a Joan Gómez por haberme recomendado algunos de los vinos que más me han gustado como La Perlara o el Moscato Giallo de Cantina Rotaliana. Gracias a todos y espero que volvamos a coincidir.

Salud!!

Roger