29 de maig del 2014

Fonseca Vintage 1934


Quinta do Cruzeiro, el corazón de Fonseca. Photo: web
Muy pocas son las ocasiones en que se puede probar un vino tan especial como este: Fonseca Vintage 1934. Después de haberlo guardado con celo y bien conservado durante un par de años, llegó su momento. Y qué momento!
Como en todos los viejos vintage de las grandes casas, sólo el respeto a la edad ya merece un trato ceremonial: decantador, embudo filtrador, tenazas para degollar la botella, pincel con agua fría y listo. En fin, a lo que íbamos, Fonseca es, seguramente, "la bodega" o una de las tres o cuatro bodegas de referencia de Oporto (junto a Quinta do Noval, Taylor o Dow´s) a nivel de calidad, en mi opinión. Todo un referente para los amantes del mejor Porto. Sus vinos tienen fama de ser potentes, muy aromáticos y bastante tánicos. Este Vintage de 1934 no sería una excepción.
Lo que más nos impresionó de este vintage octogenario fue su intensidad; puede parecer un tanto contradictorio que un vino tan añejo, en lugar de ir perdiendo sus propiedades con el paso del tiempo, las haya conservado tan bien. Ochenta años después, sigue siendo un vinazo estructurado, opulento, con su punto de tanicidad marcado y un extenso bouquet aromático que abarca tanto avellanas como dátiles calientes o caramelo sobre todo un conjunto de aromas derivados de la crianza y el reposo. En boca conserva esa espectacular acidez que da fama a los vintage de la bodega, incluso en los años cálidos. Es un vino complejo, que mantiene un equilibrio impresionante a pesar de las décadas que lleva a cuestas. Una armonía inolvidable que invita a la meditación y el disfrute. Un vinazo de esos que sólo bebes una vez en la vida.

Salud!